Últimamente os tengo muy abandonad@s, ha sido un año muy intenso de trabajo y muy a mi pesar no he podido publicar.
Tenía pendiente desde hace bastante el artículo de como quedó mi cocina después del proceso de reforma, en la cual me ayudasteis un montón porque os pedí consejo y gracias a ellos tuve bastante más claro la decisión del resultado final.
Ahora con el reto de facilisimo de la casa del año, me he decidido a enseñaros todo el proceso que seguí para el cambio radical de mi cocina.
Yo vivía en un piso de alquiler que luego compré, la cocina era bastante antigua pero decente y a los electrodomésticos muy a mi pesar les había llegado la hora y había que hacerles un bonito entierro; así que aunque es verdad que mi filosofía es la de reutilizar y no gastar demasiado, me decidí a cambiar la cocina, eso sí, intentado sacar el máximo partido con el presupuesto más ajustado.
Al principio pensé en cambiar sólo los electrodomésticos y tunear los muebles, pero como mi hermano vende cocinas pues lo pensé mejor y bueno nos hicimos un favor mutuamente.
Es una cocina de azulejos clásicos blancos, alicatada hasta el techo y en muy buen estado, suelo porcelánico gris que me gusta y no tenía intención de cambiar, pero sí, es cierto, se veía antigua.
Rectangular, puerta de entrada, zona de fregadero izquierda, zona de cocina derecha y fondo el lavadero.
El reto; como hacer un cambio radical sin tener que recurrir a albañiles, cosa que con solo pensarlo me temblaban las piernas, y sin gastar excesivamente.
En la fábrica de cocinas donde trabaja de mi hermano
CEXCO5 me dieron la solución a lo que yo buscaba; respetando el diseño original en cuanto a tomas de agua, luz etc... y con la idea de
modernizarla, me dieron la idea de poner unos paneles a medida del mismo material de los muebles de cocina, para ocultar los azulejos.
Tomaron medidas de todo, me dieron diseño por ordenador gratuito (ojo!! se lo hacen a todo el mundo) y decido panelar sólo la zona de trabajo, es decir, parte izquierda y derecha. Para ello se necesitaron 3 paneles grises del mismo material de los muebles pero en color mate.
Lo que más caro salió, lógicamente fueron los electrodomésticos pues se cambiaron todos, frigorífico, lavadora, lavavajillas, horno, microondas, cocina y campana extractora, y además integrados que salen más caros, porque lo que fueron los paneles creo que no llegaron ni a 150€.
Os cuento el proceso.
Antes.
Cocina blanca y funcional, demasiadas cosas a la vista y yo no tengo tiempo para limpiar, por eso decidí que quería que todo estuviera oculto, incluidos electrodomésticos.
En la cocina antigua se pueden ver las llaves del agua en el techo, ahora se han tapado con un mueble esquinero.